Las combis son furgonetas reconvertidas en autobuses donde tu jurarías que entran 15 y no, ¡entran 40! dónde puedes ir tan apelotonado que no puedas ni respirar y el cobrador repita: "¡Al fondo hay hueco!" o incluso que paren a por ti en cualquier sitio sin esperar a esos supuestos paraderos oficiales. Algunas estan tan gastadas que sigo pensando que se mantienen juntas a fuerza de cariño, por que lo que es soldadura ya no les queda.
Lima tiene mil lineas, buscar como vas a llegar de un sitio a otro puede ser una locura, por que es probable que tengas que probar a ver si alguna te lleva o preguntar a todas las que se acerquen. Pero aún así tienen su encanto.
Por eso fueron mi proyecto de fotografía, por que ha sido una de las cosas que ni aún a fuerza de costumbre dejan de sorprenderme, por que siempre habrá una combi más vieja que la más vieja que has visto en tu vida y por que en mi primer viaje en combi pensé que iba a morir y ahora ya estoy acostumbrada
No hay comentarios:
Publicar un comentario